Dedicado a mi querida esposa, gracias
a la influencia y testarudez de mi gran
amiga Elvira Daudet
Se que te
di mas penas que alegrías
más
espinas filosas que jardines,
que
naufragué entre llantos y violines
al sentir
que tus manos eran mías
y
apartaban mis horas más umbrías
perfumando
mi angustia con jazmines,
aunque tu
a lo mejor ni te imagines
que
llenaste mis horas mas vacías .
Quizás ya
no haya tiempo para darte
un poco de
lo tanto recibido
y si fuese
así, igual he de contarte
que lo
poco que en mi vida he sonreído
se lo debo
a la gracia de mirarte
y a tu
amor, que ilumina lo vivido.
13 comentarios:
Pues celebro la testarudez de Elvira si te ha impulsado este hermoso soneto.
Abrazo, Gustavo.
Gustavo, amigo: un soneto más de los tuyos, expresando tu amor por tu mujer. Gracias por expresarlo de esa manera tan clara y con olor a jazmines. No te preocupes, el amor que tu mujer te ha dado lo ha sido sin pedir rrspuesta. Así es el amor de las mujeres, generoso, total, sin exigencia de reprocidad. Son mejores, ¿verdad?. Un abrazo.
Bellisimo poema, calido y tierno este que dedicas a tu esposa, ha sido un honor visitarte
Un abrazo
Stella
Qué alegría hallar un soneto nuevo de mi poeta preferido en este difícil arte. ¡Y qué soneto!, tan tierno y lleno de amor, de humildad y de reconocimiento a la amada, que ni siquiera la devastadora costumbre ha conseguido difuminar en tu corazón. Un abrazo para ella, con mis felicitaciones por mantener vivo el amor.
Decenas de veces he venido y me angustiaba encontrar los malvones cada vez más mustios. Menos mal que me ha avisado Paloma Corrales, que tiene antenas supersónicas, porque si no me lo hubiera perdido aún fresco.
Escribe, aunque sea unas líneas, y cuéntame como estás, no dejes morir nuestra amistad por pereza.
Gracias por la delicadeza de citarme en un soneto tan hermoso.
Mil besos
Elvira
Hermosa ofrenda de amor, a esa persona que acompana el corazon a diario con su presencia. Un poema lleno de tiernos aromas y palabras dulces, del amor que con el tiempo se perpetua, mas alla de la costumbre. Un super placer siempre leerte. Un abrazo desde mi caribe
los versos 6, 7, 8 son perfectos
tanto como los anteriores y posteriores, amigo Gustavo
te mando un fuerte abrazo
Gracias, Gus por todo lo que sientes al escribir...y lo que nos regalas para sentir...
Bellísimo, una declaración de amor sublime, me encantó.
Besos poeta y me alegra tu regreso.
REM
Un soneto espectacular, Gus, de veras...es una gozada, un auténtico placer leerte, maestro.
Un abrazo.
Amigo Gus,es para mí un placer volver por tu blog después de un tiempo y encontrarme de nuevo con tus sonetos.
En este caso dedicado a tu compañera de travesía por la vida.
Es un soneto digno de ella,sin duda,donde sacas a la luz lo que reposaba dormido.Creo que ella estará orgullosa de que lo hayas escrito.Ya sabes,a ellas les gusta que le digamos lo que sentimos.
Te mando un abrazo sincero desde la gratitud siempre por aquellas primeras ayudas tan valiosas para mí a la hora de internarme por la senda del soneto.
Hola Gus. Como hacía mucho que no te veía por el Mono, me he dicho:
voy a sentarme un poquito en el banco del rey del soneto, y he de decirte que me ha gustado muchísimo. Unos sentimientos hilados con dulzura y mucho cariño.
Felicidades a tu esposa por ser la musa de tan bellos versos.
Un placer siempre y un abrazo.
Amigo Gustavo,
que alegría regresar, después de tanto tiempo, y leerte en este estremecedor y bellísimo soneto. Me has dejado sin palabras ante tanta hermosura emotiva y poética. El sentimiento rezuma por cada una de sus palabras y llega directo al corazón.
Mil felicidades, poeta. Y un abrazo enorme.
Hermoso. No puedo decir nada más.
Publicar un comentario